lunes, 4 de julio de 2011

¿Qué significa ser educador en tecnología?

Para determinar que implica ser educador en tecnología, primero determinaremos:

¿Qué significa educación tecnológica?
Llamamos educación tecnológica a la instancia de formación que habilita a una persona para la comprensión, selección, uso, adaptación, evaluación y creación de técnicas y, eventualmente, tecnología.
Ello permite:
1Vincular la educación con el entorno tecnológico de la vida cotidiana y mejorar su comprensión para actuar racionalmente sobre él.
2.Reunir saber y saber hacer en un solo proceso didáctico.
3.Preparar a la vez para el trabajo y para los estudios superiores.
4Ayudar a la orientación profesional de los alumnos.

¿A qué apunta la capacitación en tecnología?
En mi opinión, tanto el docente como el alumno que se pone en contacto con la tecnología deben aprender "algo más" que los hechos, principios y procesos que se explican habitualmente en la escuela, por lo que es necesario que ambos adquieran competencias específicas para el quehacer tecnológico.
La escuela fue, y es, una institución fuertemente orientada a la obtención del saber. Concebimos una escuela de calidad como aquella que enseña a observar, investigar, indagar y comprender. No se trata ahora de oponer un nuevo modelo sino de complementar el anterior: recrear una escuela que también enseñe a organizar la acción, a inventar, a generar alternativas, tomar decisiones y resolver situaciones reales.

Competencias para lo tecnológico
La mera descripción de conocimientos técnicos no prepara adecuadamente para percibir y abordar los problemas tecnológicos. Para resolver este tipo de problemas ­relacionar hechos, analizar procedimientos, estimar recursos y resolver técnicamente- es necesario abordarlos desde una perspectiva tecnológica.
Si consideramos que una competencia es la aptitud o idoneidad para actuar en un campo específico, ser educador en tecnología supone:
1)dominio de algunos conocimientos,
2)algunas reglas para actuar, y
3)alguna experiencia.
Consecuentemente, la noción de competencia no implica sólo la posesión de un conocimiento, ser competente para significa:
- saber hacer,
- querer hacer, y
- poder hacer.

¿Cómo se adquieren las competencias?
Actuando, usando materiales y herramientas, operando dispositivos, mejorando procedimientos, probando soluciones alternativas.
Para actuar con naturalidad en entornos tecnológicos, el docente debería adquirir competencias específicas para el quehacer tecnológico, tales como:

Capacidad para:
- Percibir nexos entre necesidades y recursos, entre recursos y procedimientos, y entre procedimientos y resultados.
- Organizar situaciones: captar los componentes y las relaciones e idear la configuración más satisfactoria en función de una meta.
- Transformar ideas en procedimientos y aplicaciones concretas: pasar de la enunciación o verbalización de una alternativa a imaginar y concretar cursos de acción.
- Perseverar en la búsqueda de resultados.
- Adquirir una actitud crítica y constructiva respecto de las soluciones.
- Inventar, como percepción e identificación de problemas e imaginación para
generar soluciones alternativas.
Habilidades para:
- explorar y desentrañar dispositivos y artefactos.
- utilizar adecuadamente dispositivos, artefactos y herramientas.
- seguir secuencias de instrucciones.
- representar gráficamente procesos y dispositivos.
- materializar ideas.
- crear procedimientos.

Actitudes:
- curiosa y exploratoria.
- activa e inconformista.
- prospectiva.
- favorable a la manipulación y a la experimentación.
- proclive al cambio, al desarrollo y al crecimiento.
Esto permitiría explicar con mayor profundidad las dificultades y los "miedos" de los docentes: aparentemente, los esfuerzos de capacitación y los "riesgos" son grandes porque el docente no tiene ni la formación ni la perspectiva tecnológica que la sustente. La Tecnología es algo más que una reflexión sobre la Técnica: es saber hacer y el método tecnológico no puede reducirse al método científico, aún cuando así puedan sugerirlo personas abocadas a la enseñanza de las ciencias.
El docente tradicionalmente ha sido capacitado para utilizar el método científico.
Describir, definir, explicar, realizar verificaciones y comprobaciones. También ha sido formado para transmitir adecuadamente el conocimiento. Pero la tecnología no es ciencia. Como dice T. Von Karman, el científico explica lo que existe y el tecnólogo inventa lo que no existe.
Resolver una situación tecnológica también implica conducir un proceso diferente a la resolución de problemas en ciencias. Definida la necesidad a satisfacer, surge rápidamente tener en cuenta otros aspectos. El análisis de la situación nos lleva a realizar un inventario de recursos y limitaciones, tanto humanas como materiales. Los criterios de solución habitualmente incluyen: costo, rapidez y recursos diversos, en distintas combinaciones posibles, que llevan a definir el mejor producto, proceso o prestación, lo más rápidamente posible y, a veces, al menor costo.
Los recursos y las limitaciones son dos términos que deben incluirse en la búsqueda de la solución tecnológica. Dinero, equipos y tiempo son siempre recursos limitados. Tecnológicamente tampoco es posible definir una estrategia sin tener en cuenta el contexto, las características sociales, culturales y éticas, que condicionan a la situación.
El docente tiene, mediante la utilización didáctica de distintos entornos tecnológicos, la oportunidad de generar esas competencias en sí mismo y en sus alumnos.
El logro de las competencias enumeradas por parte de nuestros alumnos dependerá de la adecuada resolución de las siguientes situaciones:
1)definir un enfoque lógica y psicológicamente pertinente al nivel,
2) seleccionar contenidos relevantes y perdurables por ser constitutivos e inherentes al quehacer tecnológico, y
3) proponer experiencias de aula significativa para el alumno, tecnológicamente fundada y operativamente viable en la escuela.